[El después]

Querido lector Anónimo:

Después de terminado el "II Encuentro de escritores jóvenes del norte de México. Voces convergentes en La Silla" (como todos los nombres oficiales, es largo, redundante y retórico), sigue teniendo éxito. Prácticamente todos los blogs hablan de él, de la maravilla que fue, de los organizadores (Gaby, Óscar David, Nohemí, Belén), de los invitados especiales (Leonardo Da Jandra y Guillermo Fadanelli), de las borracheras, de los personajazos que allá nos dimos cita... y más: en el messenger, todos nos confesamos nostálgicos de no encontrarnos todos reunidos en Monterrey pasandola "con madre", los mails van y vienen con las fotos testimoniales de las escenas más divertidas y bizarras (o bizarras por divertidas, o al revés), intercambiando mails, direcciones, invitaciones a publicar en las distintas revistas y fanzines de los editores que por allá anduvieron (no saben que yo no publico en la revistucha local de San Pedro de las Ranas, como le dije una vez a mi amada Gaby), y en fin, ese es el tono awitado en el que yo mismo escribo, extrañando a madres a todos: de hecho, en dos días que llevo en mi ciudad no he salido de mi cuarto y sigo hablando como norteño ("con madre", "pisa", "ya sé", "pistear", "jalar" son expresiones que aún no se van de mi boca y, la verdad sea dicha, quisiera que nunca se fueran). Pero a él más que a nadie es a quien extraño...

Más abrazos desde la antigua ciudad de los Lagos, hoy de los charcos y las inundaciones, ah!, pero eso sí, de la Esperanza,

VV.