La vida gay tiene ese encanto, coger bien (o rápido en este caso), obviar la molestia de la seducción gratuita y el romance, saber que las cosas empiezan y terminan en un lapso fugaz. Es como tomar una copita de licor: concentrada, chiquita, áspera, solo para que te quede el gusto en la boca de algo que desaparece inmediatamente.
Dirigido a... [él ya sabe a quien]... tomado de: www.putoyaparte.blogspot.com
3.9.05
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1 comentario:
Sedúzcame. Verbo argentino consuela pero no (me) convence. Sobre todo, porque no soy parroquiano de ese café... a penas duras un Jarocho, a tristezas aparte el Starbucks Relox... Lo invito, ¿me invita?
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