El metro de esta posapocalíptica ciudad de México está infestado de la propaganda que, a un mes de que el Peje de Gobierno deje el puesto para lanzarse para La Grande, está dedicada a ensalzar los "logros" de la administración lopezobradorista. Bajo el slogan "A mí, me cumplió", se informa que el Peje ha ayudado a los viejitos, a las madres solteras, a los micro y pequeños empresarios (¡y se queja de la changarrización de Fox!), hacer parecer a esta ciudad como si la hubieran bombardeado con obras del segundo piso en periférico, el distribuidor vial en Zaragoza, el remozamiento de todo Reforma, la tala indiscriminada de árboles para poner su fracaso mayor: el Metrobús, etc.
A mí, en cambio, no me ha cumplido. He aquí los 4 puntos que le sigo reclamando.
1. El metro es cada vez peor. Yo que leo en el metro, en la línea 3 va uno en tinieblas, está cada vez más sucio, se para más entre estaciones, e incluso, en el tunel como si ahí fuera la parada, y por si fuera poco, una vez me toco un chispazo horrible que ya me hacía muerto ahí. La tarifa no ha subido desde que Chayito Robles dejó la administración, así que el mantenimiento y las instalaciones todas están en ruinas. Y aunque los trabajadores del metro hicieron su campaña "Segundos pisos no, Metro sí", el Peje se hizo de la vista gorda y siguió con la construcción de los segundos pisos. El señor AMLO prometió gobernar para los pobres: los pobres no vivimos al poniente de la ciudad ni utilizamos auto, si no el Metro. Finalmente, se tenía pensado construir una línea más sobre el eje 8 sur que iría de Barranca del muerto hasta Iztapalapa, en su lugar, se informó hace poco, se construirá, sí señor, un Metrobús.
2. Su política cultural, lo dijo hace no mucho JEP, consiste en llevar a los artistuchos de Televisa y Tv Azteca al Zócalo. Aunque transformó el que era el Instituto de Cultura de la Ciudad de México, en Secretaría de Cultura, le quitó más de la mitad de su presupuesto y sus actividades se redujeron a la nada. Sacó vilmente del puesto a Alejandro Aura y en su lugar puso al gris Enrique Semo, éste se fue y se nombró a la actual, una mujer que nada sabe ni relación alguna tiene con la cultura. Así las cosas en este ámbito...
3. El Peje fue el único responsable de que se abortara la que yo llamo, Ley de Suciedades de Conveniencia. Aunque yo estoy en contra por razones que no vienen al caso, otra cosa es que el mocho del Peje la aborte, gracias a su moches (¡qué paradoja que tan buena!), y se eche a la basura todo el trabajo y el consenso que ya se tenía para aprobarla inmediatamente.
4 y última: Si mal no recuerdo prometió crear el Instituto de la Juventud de la Ciudad de México y no lo ha hecho, la oficina para atención a la juventud sigue dependiento de la Secretaría de Desarrollo Social y el Instituto, bien gracias, en la congeladora.
Y como muy seguramente va a ganar la presidencia en el 2006, precisamente por eso no votaré por él. A mí no me cumplió.
14.7.05
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1 comentario:
Aunque no vivo en el DF, coincido inexorablemente contigo.
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